Las clases en el centro de educación básica genera Santa Clara, en Arraiján, provincia de Panamá Oeste, fueron suspendidas nuevamente debido a la permanencia en el cargo de la directora del plantel
A mediados de julio, las clases en esta escuela fueron paralizadas por dos semanas, ante la negativa del Ministerio de Educación (MEDUCA) a cumplir de forma inmediata con la exigencia de los acudientes de separar del cargo a la docente.
No obstante, las clases se reiniciaron a inicios de agosto, luego de reunirse una comisión de padres de familia con funcionarios del MEDUCA, los cuales se comprometieron a dar una respuesta en 15 días.
Al no recibir una respuesta a la solicitud de separación de la directora del plantel, los padres de familia optaron por suspender nuevamente las clases e impedir la entrada de los maestros a la escuela.
Voceros de los acudientes indicaron que persistirán en la solicitud de separar del cargo a la directora titular y la realización de una auditoría al Fondo de Equidad y Calidad de la Educación (FECE).
El mismo procedimiento es solicitado para los temas de licitación del kiosco escolar, compra de alimentos y supuesta pérdida de equipos de la escuela.
Los voceros agregaron que aún están a la espera del resultado de las averiguaciones que realiza la Defensoría del Pueblo, sobre la supuesta autorización dada por la directora de la escuela a miembros de un grupo religioso, para ingresar al centro escolar.
Por parte del MEDUCA se informó que la separación de un director titular implica una serie de procedimientos administrativos y legales que no pueden ser obviados.